#DaliVasti
Oaxaca, Oaxaca – 04 Noviembre 2024
La inseguridad en el transporte público de Oaxaca sigue siendo una preocupación para sus usuarios, quienes diariamente enfrentan riesgos debido a las malas condiciones de los vehículos que operan en la ciudad. Este lunes, una unidad de transporte urbano sufrió el estallamiento de una llanta trasera en pleno recorrido, poniendo en peligro a los pasajeros y dejando en evidencia la falta de mantenimiento en el servicio. Los usuarios reportan que no es un caso aislado, sino parte de un problema generalizado en la flotilla que circula en la ciudad.
Según relatan algunos testigos, el estallido de la llanta provocó una nube de humo, lo que generó pánico entre los pasajeros que intentaron alertar al chofer. Sin embargo, el conductor, quien presuntamente llevaba el estéreo a alto volumen, no se percató de la situación de inmediato y tampoco ofreció ayuda a los pasajeros para descender de la unidad. La falta de respuesta oportuna ante una emergencia de este tipo ha sido ampliamente criticada, sumándose a la lista de reclamos que los usuarios tienen sobre el servicio de transporte en Oaxaca.
La Secretaría de Movilidad de Oaxaca (Semovi) ha autorizado recientemente un aumento en la tarifa del transporte urbano, pero usuarios denuncian que esta medida no ha venido acompañada de mejoras en las condiciones de las unidades, muchas de las cuales presentan fallas mecánicas visibles y operan en condiciones precarias. La situación ha generado un creciente descontento entre la población, que señala que las tarifas elevadas no se corresponden con la calidad del servicio.
“Es indignante pagar más cuando las unidades están en este estado. Muchos transportes son verdaderas chatarras que apenas se mantienen en movimiento. ¿Hasta cuándo vamos a estar en peligro al usar el transporte público?”, expresó una pasajera que estuvo presente durante el incidente.
Este incidente se suma a la lista de quejas por el estado deteriorado del transporte público. En las últimas semanas, usuarios han denunciado problemas recurrentes que van desde fallas mecánicas, unidades con interiores sucios y asientos dañados, hasta conductores que no respetan los límites de velocidad y normas de seguridad. Las quejas también abarcan la falta de aire acondicionado o ventilación adecuada, y en algunos casos, hasta la ausencia de rampas o espacios adaptados para personas con discapacidad.
A pesar de la reciente alza en las tarifas, el mejoramiento de las condiciones del servicio parece estancado. La ciudadanía ha cuestionado a las autoridades de Semovi y a los concesionarios del transporte por no establecer políticas claras de mantenimiento y revisión de unidades, a fin de garantizar un servicio seguro y digno. Además, algunos usuarios han señalado que la falta de regulación y supervisión en la calidad de las unidades podría estar directamente relacionada con el incremento de incidentes como el ocurrido hoy.
Organizaciones ciudadanas han exigido a las autoridades del transporte implementar medidas inmediatas, que incluyan inspecciones más rigurosas y sanciones para los operadores de unidades que no cumplan con los requisitos de seguridad y mantenimiento. Asimismo, han solicitado que se destinen fondos específicos para la renovación de la flotilla de transporte urbano, la cual se encuentra en estado obsoleto, con unidades que llevan años sin recibir mantenimiento adecuado.
El caso de esta unidad con llanta estallada refleja una realidad preocupante en el transporte urbano de Oaxaca, una situación que requiere pronta atención de las autoridades para prevenir accidentes y garantizar la seguridad de los pasajeros. Mientras tanto, usuarios y organizaciones siguen demandando una respuesta contundente, que asegure que el aumento en tarifas se traduzca en un servicio digno y seguro, y no solo en una carga económica adicional para la ciudadanía.