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La Auditoría Superior del Estado de Oaxaca (ASFE) reveló un presunto desvío de 31.4 millones de pesos durante el ejercicio fiscal 2022 en los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Oaxaca (SAPAO), cuando Reynaldo Cuauhtémoc Hernández Cuevas estaba al frente del organismo.
La Secretaría de Honestidad del Gobierno de Oaxaca validó los hallazgos y turnó denuncias formales a la Fiscalía Anticorrupción, la cual ahora debe emitir órdenes de aprehensión contra los responsables.
Según el informe 2022-OA/CPE/12/2023, se detectaron 31 irregularidades, de las cuales 18 no fueron solventadas. Entre las anomalías destacan:
Contratos con proveedores no registrados
Obras públicas adjudicadas sin licitación
Pagos excesivos en al menos dos obras
Discrepancias contables
Falta de dictámenes del Comité de Adquisiciones
Los montos no aclarados suman más de 31 millones de pesos, con observaciones que van desde pagos menores hasta transferencias superiores a 18 millones.
Hernández Cuevas fue nombrado por el entonces gobernador Alejandro Murat Hinojosa en marzo de 2022, bajo la promesa de una gestión transparente.
¿Y la justicia?
La ciudadanía exige que la Fiscalía Anticorrupción actúe con firmeza y deje de postergar la justicia. No basta con recibir denuncias, es hora de actuar.